Homenaje a las madres de soldados

Una madre recibe una carta
negra aunque fuera blanca
fría aunque no,
pero la madre así lo presintió.


Le tiemblan las piernas
y un sudor frío le corre por la cara
parece que el corazón se le va a salir
y el alma cree no poder aguantar.


La madre se dispone a leer la carta
el sobre ya lo abrió,
en el remite ponía
Gobierno Español.


En aquellas duras palabras escritas
con una fría tinta de ordenador
que su hijo aquel al que le dio la vida
ha muerto en combate en una misión.


La madre sin fuerzas da un grito al cielo
buscando una respuesta de Dios,
aunque duda firmemente que exista
ahora no está para religión.


Y en la despedida al soldadito
rendiéndole un homenaje
los ojos vacíos de una madre
se reflejaban en el cielo,
alguien dijo, a muerto por el pueblo,
ella se vira y dice,
como se nota que a tu hijo
lo podrás ver luego.


Pero mentira no es que orgullosa
en el fondo está la madre
su hijo a muerto por su patria
eso lo hace aún más grande,
aunque aún sigue mirando al cielo
buscando una explicación.